Hace dos temporadas veíamos Kimonos por todas partes, pero parecía que en las grandes formas de moda Mainstream esta “moda” había pasado. Sustituyéndolos por chaquetas de punto o abrigos de verano. Sin embargo, da la impresión de que no sólo vuelven, si no que lo hacen con fuerza.

En el último mes hemos visto a unas cuantas instagramers internacionales de nuevo con outfits con Kimono, pero ha sido hace poco más de 10 días cuando Zara ha incluído una de estas piezas en su nueva colección. Es un Kimono con pedrería, creado como complemento para Outfits de fiesta pero con una clara inspiración en la prenda japonesa.

Juzgadlo por vosotras mismas:

Con un precio de 129€ emula tanto la caída como la estructura de un Kimono o Juban y a excepción de la cantidad de lentejuelas mantiene relativamente bien el patrón de la prenda que evoca.

Esta semana pasada, hemos leído como el Kimono es la pieza ideal para la Semana Santa, como un Juban queda ideal para los previos de Novias, como un Haori le da un punto especial a cualquier combinación de entretiempo…y no podemos estar más de acuerdo. Los Kimonos son tendencia y lo seguirán siendo!

Y no es porque a mí me encanten, que también. Es porque en medio de toda está vorágine de la “fastfashion” volver a utilizar prendas que fueron creadas hace más de medio siglo nos hace recuperar un poco de la elegancia y el buen hacer pasado, pero también cierta perspectiva.

En Japón, cada día más, se consume ropa de segunda mano o vintage. Ya hay grandes cadenas de “second hand”como Mode Off en muchos de los barrios de moda de Tokyo y de cualquier ciudad. Y es que, parece, que ha llegado el momento de tomar conciencia y tratar de hacer algo para bajar el ritmo loco de consumo forzado.

A diferencia de otros países en los que también está de moda el Vintage (Aquí más el vintage de los 90) en Japón existe un amor eterno por el vintage de los 70 en adelante. Encontramos auténticas joyas en un estado de conservación casi perfecto.

Uno de mis pequeños caprichos cuando estoy en Tokyo es hacerme alguna escapada a mis tiendas favoritas de segunda mano y llevarme 3 o 4 tesoros que incluyo en mi armario con muchísima alegría.

La cuestión aquí es si podemos encontrar un equilibrio entre la ropa nueva que compramos y la que recuperamos.

No hace falta que os diga que soy una firme defensora del uso de la ropa recuperada. Por eso, hace ya 6 años que decidí vender Kimonos Vintage japoneses y, por eso también, ya llevamos dos colecciones a las que hemos llamado “mottainai” en las que recuperamos kimonos que ya no podían ser usados como tal (Pequeñas manchas, roturas, desgarros en la seda) y con muchísimo trabajo vamos salvando toda la seda posible, tratamos de conservar los estampados y bordados y en definitiva, logramos al final rescatar todo lo posible para transformarlo en nuevos patrones pero conservando esta historia del pasado.

Uno de nuestros Kimonos o Haoris que tiene más de 50 años se encuentra en un estado de conservación perfecto y listo para ser utilizado otro tanto, como mínimo. Con lo que, haciendo una mínima reflexión, quizás nos conviene invertir un poquito más en prendas que ya han demostrado sobradamente su durabilidad y que, como decíamos al principio, nunca pasan de moda.

Así es que, avisadas estáis, en las próximas semanas, volveréis a ver mucho Kimono en redes sociales y medios. La cuestión ya sólo es si elegimos un auténtico Kimono Vintage o una nueva creación del “fast fashion”…tú que prefieres? 😉